Entorno y Hotel
ENTORNO
Grañón es un pueblo milenario, de unos 300 habitantes, atravesado por el Camino de Santiago, donde los turistas van a encontrar paz y tranquilidad. Su incomparable belleza no deja a nadie indiferente, pues nos encontramos con una localidad rodeada de un paisaje lunar, por las formas de los campos de secano, donde el color predominante varía según la estación del año.
El Camino de Santiago ha conducido durante más de mil años a los peregrinos hasta el santuario del apóstol Santiago. Su tumba sería la piedra fundacional de una Catedral y de una ciudad que, desde entonces, atraería las huellas de los caminantes hasta convertirse en un destino con el rastro y el eco de toda Europa.
EL HOTEL
El punto de partida de este proyecto fue una tradicional «casa solariega». Una construcción propia de la arquitectura popular de La Rioja.
Las casas solariegas son edificaciones cuyos orígenes se remontan al siglo XVI. La mayor parte de las casas son de dos plantas, en las que se utiliza mampostería y sillería en la parte inferior, y madera y ladrillo en la superior. Muchas fachadas albergan antiguos escudos, pertenecientes a las familias a las que pertenecían. En este caso es una peculiaridad que la Casa Grande no albergue ningún escudo, una casa noble con capilla y altar, dónde no quisieron aparentar riqueza.
La casa es del siglo XVIII y cuenta con dos plantas de sillería y sillarejo, vanos adintelados y un balcón con herraje. Conservar y mostrar la piedra, desnudando el edificio, ha sido la clave en esta intervención minimalista para que Casa Grande Hotel tenga el esplendor que tuvo antaño.
Tanto en el interior cómo en el exterior se ha dejado la piedra vista en paredes, con el objetivo de mantener la esencia y la simplicidad de la misma casa, consiguiendo una imagen unificada en toda la edificación. El diseño obedece siempre a unas reglas y los detalles espaciales cumplen con un objetivo, pero también es cierto que en Casa Grande Hotel se trabajó duramente por hacer palpables energías invisibles, cómo el vacío y el lujo de los espacios grandes.
La restauración y rehabilitación del edificio empezó en febrero del 2019. Las técnicas constructivas han sido las propias del año en que vivimos y se ha tenido un especial cuidado en la elección de los materiales aislantes, que son de gran calidad, así como en la rehabilitación y en la construcción de la nueva cubierta.
Integrar un proyecto de semejantes características en un marco tan privilegiado cómo este, conllevó una gran responsabilidad en la utilización de todas aquellas técnicas constructivas que garantizasen su optima eficiencia energética, integración visual en el entorno y sostenibilidad.